Se hizo esperar pero por fin volvió, la nieve, ese deslumbrante objeto del deseo. Tras un mes de Enero de anticiclón, un frente que se cuela nos deja casi 50 centímetros de blanco tesoro sobre nuestras montañas y valles. Un cruce de What´sApps y ya está organizada la jornada, Manuel León y yo subiremos al Puerto de Navacerrada a hacer unos cuantos giros.
Aún de noche nos calzamos nuestras tablas y comenzamos a foquear hacia la Bola del Mundo, la ruta elegida fue el lateral exterior Norte de la pista Pala de Montañeros. En estos primeros minutos, los frontales son nuestra guía en el ascenso, con el que, poco a poco, vamos alcanzando el primer objetivo.
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| Dos tipos muy felices. |
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| Primeras rampas, detrás el puerto de Navacerrada. |
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| Manuel en la Bola del Mundo. |
Y así embelesados con el panorama legamos a las antenas de nuestra primera cima del día! Ritual de paradita para disfrutar de las vistas, un poco de líquido, cambio de modo de la tabla de subida a bajada, elección de la ruta a seguir, clazarse y a disfrutar!! Y claro que disfrutamos, de una más que buena nieve polvo compacta en las zonas de acumulación por el viento, costra en las zonas más expuestas.
Después le tocó el turno a Valdemartín, dirigiendonos así a la segunda cima del día, un ascenso sin mayor complicación, de pendiente mantenida hasta alcanzar el monolito de la cumbre.
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| Ascendiendo a Valdemartín. |
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| Manuel en la antecima de Valdemartín. |
Después de repetir el ritual del cambio, decidimos bajar por la pala SE, que termina a los pies de la Cabeza Menor. Encontramos más nieve crema, compacta pero muy agradecida en los giros, delicia pura!
La vuelta nos llevó de nuevo a la cima de Valdemartín y de la Bola del Mundo, desde donde bajamos hasta el Puerto de Navacerrada, completando la actividad del día. Ahora tocaba la peor parte... Enfrentarse con el parking lleno de coches y gente!!
Rider: Manuel León
Fotos:
Daniel Ateca
Texto: Splirit
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